abril 16, 2006

Tengo una pena, una chiquita pero que jode hace ya muchísimo tiempo, y creo que por esa pena es que me he roto el corazón más de una vez, y que hasta ahora, por no cargarla de manera correcta hace unos días atrás, he rodado las escaleras tratando de atraparla en el vuelo inevitable al que te obliga la gravedad. Yo creí que podía volar, y me he fisurado un hueso del tobillo.

Le he escrito cartas interminables, poemas, memos, y hasta un par de canciones, y seguramente algunas cosas más que no recuerdo. Por esta pena, me mudé a un lugar extraño y maravilloso, y por la misma, me separé, (y volví a juntar), por ella conseguí un gato amarillo al que llamé Clara, y por ella he viajado sin sentido a través del tiempo en los millones de historias que han llegado a mis manos en un vano intento por hacerla a un lado.

A mi no me mueve la euforía, tampoco la tranquilidad, o la algarabía efímera de los logros inmediatos, me mueve esta pena, la pena de no encontrar, de buscar sin sentido, sin esperanzas, la pena de telenovela y drama rosa, tal vez porque me criaron en una época en la que la vida como la conocíamos llegaba su final irremediablemente, o tal vez porque después de todo es completamente inevitable ser como soy.

2 Comments:

Anonymous Anónimo said...

ser como somos.... algunos. Deep post, tks

00:36  
Blogger miliodebolengo es mi gato, miauuuuu said...

... gracias por visitarme, muchas gracias!
:)
qie pena no poder comunicarme contigo, hay personas a las que me encantaria conocer sólo para saber que existe vida detrás del monitor.
un beso usuario anónimo

10:35  

Publicar un comentario

<< Home